viernes, 21 de enero de 2011

Los Paradigmas de la Venta

Nuestro desarrollo personal en el ámbito social en donde crecimos y evolucionamos nos lleva permanentemente a aceptar ciertos modelos, ejemplos, normas y reglas que consideramos permanentes y difíciles de modificar denominados "paradigmas".

Este fenómeno psicosocial y cultural tiene diferentes consecuencias puesto que asumirlos como tales limitan nuestra evolución en el ámbito que ellos han sido establecidos.

Desde los albores de nuestra historia fueron surgiendo, tal vez porque hemos necesitado fundamentar ciertos aspectos para proveernos la seguridad necesaria como para dar cada paso en los numerosos aspectos de nuestras vidas que requieren de acción.

A modo de referencia de paradigmas de la historia, podemos compartir los siguientes:

° Galileo Galilei tuvo la osadía de difundir su teoría de que la Tierra giraba alrededor del Sol que era contrario a la vieja creencia en que aquella era el centro del universo y tuvo que purgar varios años de prisión en la Edad Media por intentar quebrar el viejo paradigma.

° Si el reloj que lleva en su muñeca posee un mecanismo de cuarzo, le informamos que fue inventado por un suizo durante el siglo pasado que no pudo vencer el paradigma de su época que señalaba a los relojes con mecanismos mecánicos eran los más precisos, además de ser "la tradición del país de los relojes". Tuvo que vender su invento a Texas Instruments en una feria en Japón para que estallara el fenómeno que representa el cuarzo en la industria relojera mundial.

Los paradigmas de la venta

En la gestión que procura cotidianamente lograr resultados de venta y a través de la trayectoria no tan feliz que ha tenido en su historia hasta nuestros días, por las reiteradas y desafortunadas experiencias como consumidores frente a una improvisación generalizada de muchos que la ejercen en la cornisa lindante con la "mala praxis" por el desconocimiento sobre su ejercicio profesional, también tiene sus paradigmas.

Conocerlos puede resultar muy ilustrativo para clarificar todo panorama en el futuro para el mejoramiento en su ejercicio cotidiano en todos los ámbitos de aplicación.

Entre los paradigmas más generalizados y comunes en ventas dentro de nuestra cultura iberoamericana podemos señalar los siguientes:

La venta es sinónimo de "engaño"

Es innegable el efecto real que una profesión ejercida en forma improvisada, tan generalizada y durante tantos años hasta en la actualidad, puede llegar a provocar en su imagen.

No obstante ello, quienes sustentan este paradigma tal vez desconocen realmente qué es una venta profesional, en qué fundamentos éticos se sustenta, qué se requiere y cómo se hace para ejercerla dignamente, con productividad, consistencia y rentabilidad, recayendo así en bloquear toda posibilidad de mejora en sus propios ingresos.

Al igual que toda profesión, la venta tiene sus buenos y malos cultores, y la responsabilidad en la calidad de su ejercicio recae en cada representante y especialmente en quienes los contrate y no les provea la formación que requieren para ejercerla de una manera digna como eficiente.

A pesar de ello, todos los días se requerirá siempre el fruto vital que provee los ingresos necesarios para la subsistencia y desarrollo a través de su ejercicio.

¿Vender o que me compren?

Cuando ambos conceptos se confunden hasta el punto de llegar a optar por el más cómodo y menos riesgoso, esto se origina y sustenta por el desconocimiento de cómo se logra que nos compren con satisfacción como producto de una eficiente acción de ventas de calidad.

La Venta Profesional, que se sustenta en una gestión consultiva al aplicar las Técnicas Profesionales de Venta, logra obtener los resultados como consecuencia de una acción inductiva con cada potencial comprador para que tomen sus mejores decisiones de compra y con total satisfacción.

Lo importante es descubrir la manera en que esto ocurre y puede aplicarse con total efectividad cuando se aprenden dichas técnicas.

Es muy sencillo vender

Llega a deslumbrar a todo observador cuando un especialista en cada actividad ejerce con destreza sus habilidades y logra su cometido de una manera aparentemente fácil.

El error latino consiste en su habilidad para "improvisar" creyendo que es sencillo intentar reproducir sus actos para lograr hacer lo mismo con sólo imitarlo. Ejemplos de ello ocurre cuando observamos lo sencillo que parece ser hacer un gol en el fútbol desde la tribuna, pilotear un avión, extraer una muela, reparar una conexión eléctrica, etc.

Sin embargo sabemos que para llegar a hacerlo con eficacia y destreza es necesario aprender a hacerlo, experimentar, practicar y corregir los errores que surgen en todo proceso evolutivo de aprendizaje.

Cuando este paradigma se encuentra presente en directivos, empresarios, profesionales y emprendedores que intentan infructuosamente alcanzar resultados de venta periódicamente, por el sólo hecho de desconocer los fundamentos clave de un tema tan vital para su negocio o actividad, diariamente toman decisiones con falencias que perjudican su actividad más de lo que pueden suponer.

Entre dichas decisiones podemos señalar: la incorporación de representantes inapropiados, a ponerlos en función con carencias esenciales que atentarán contra la imagen de la empresa, sus productos y marcas, además de no lograr obtener las metas periódicas en términos de resultados.

Buscar recetas milagrosas

Aunque no se reconozca, la verdad de su existencia se aprecia al analizar muchas de las decisiones implementadas al buscar que un seminario o un curso solucione todas las carencias existentes y no clarificadas en la propia gestión.

Si bien la capacitación es indispensable en la formación inicial y continua de todo representante, sólo resultará efectiva cuando se cuente con el perfil adecuado de representante en la empresa y que el contenido del aporte responda a un método efectivo de gestión, a una filosofía y política de gestión, previamente implementadas en la organización.

Vendedor ¿se hace o se nace?

La sola existencia de este paradigma pone de manifiesto el desconocimiento sobre la gestión profesionalizada de vender.

Al igual que toda profesión, se requiere desear ejercerla, poseer cualidades para el tipo de oferta a vender, pero fundamentalmente aprender a ejercerla eficientemente para eliminar toda improvisación y carencias (mala praxis) que perjudiquen la imagen de los bienes, servicios, marcas y empresas que se representen.

La incorporación de vendedores, únicamente con mucha experiencia

A través de este paradigma se pretende solucionar carencias preexistentes en quienes así actúan: el desconocimiento sobre qué es, cómo se hace y qué se requiere para vender profesionalmente, y de ello creer erróneamente que no se debe "gastar" (en lugar de invertir) en capacitación de vendedores.

Lo más interesante es que este paradigma favorece la incorporación de representantes con mucha experiencia pero también con vicios que no pueden filtrarse al carecer de un proceso formativo que los detecte y los reemplace con las respectivas correcciones, generando daños a la imagen de la empresa, marcas, productos o servicios que se detectan cuando ya resulta tarde para revertirse.

La venta concluye con el pago

Este paradigma se manifiesta cuando los clientes perciben de una empresa o proveedor un criterio carente de toda intención y consideración de la satisfacción pos venta que debe y merece obtener con cada una de sus compras.

Luego del pago, medio fehaciente de aceptación por parte del nuevo cliente o usuario, comienza la responsabilidad de la empresa que le garantice que disfrutará de todos los beneficios argumentados en las entrevistas de venta previas a su decisión.

El único camino para la continuidad y evolución de todo oferente en un mercado consiste en asumir que si no logra desde su creencia real manifestado a través de acciones correspondientes para hacer percibir y asegurar que la satisfacción o soluciónes constituyen fundamentos esenciales, todo esfuerzo por subsistir y crecer resultará infructuoso.

Los reclamos inexistentes son prueba suficiente de la satisfacción generada

Al analizar sencillamente este paradigma se podrá coincidir en que resultaría muy riesgoso aceptar que "no tener noticias no puede constituirse en sinónimo de buenas noticias". Los daños de su aplicación generalmente conducen a una lenta agonía de la actividad, o a una rápida salida del mercado según el nivel de competencia imperante.

Cuando no se cuenta con un ámbito que permita registrar reclamos de una manera sencilla y fehaciente, los clientes pueden no estar satisfechos con la maravillosa oferta que han adquirido y resultar irreversible no detectarlo oportunamente.

Aún así, las empresas que poseen y aplican realmente criterios de calidad en la satisfacción que proveen, no sólo cuentan con ello sino que regularmente implementan otras estrategias tales como encuestas de satisfacción para detectar y realizar los ajustes oportunos y necesarios que garanticen la calidad que merecen recibir sus clientes.

Conclusiones

Quienes rompen un paradigma se los denomina "pioneros paradigmáticos", puesto que respaldados en sus firmes creencias contrarias a los paradigmas existentes crean un nuevo estado de cosas, referencias o límites creando así nuevos paradigmas.

Su disposición y determinación para quebrarlos y los logros obtenidos por su exitoso accionar hacen que disfruten de los beneficios que le corresponden al pionero por mérito propio. Aún sabiendo que dichos nuevos paradigmas serán imitados por otros y hasta el punto de verse suplantado por nuevos paradigmas en el futuro.

El tenor de los paradigmas de la venta aquí descriptos tienen su raíz en dos aspectos que han sido comprobados a través de encuestas de satisfacción recientemente publicadas en http://www.hellerconsulting.com/Envuesta_Ventas_2002.htm y analizadas en los artículos: "Como venden los que venden", "Cómo piensan los que conducen la venta" y en "Las causas que impiden alcanzar mejores ventas", y que se resumen en el desconocimiento y en la improvisación además de estar agravados por el desinterés en aprender a ejercerla con calidad, eficiencia, consistencia y con rentabilidad.

Por ello, en el caso de la venta no se trata de inventar nuevas teorías sino de incorporar los conceptos y fundamentos clave para incorporar correcciones y mejoras a lo que actualmente se está haciendo para que se logre un resultado en los términos descriptos precedentemente.

Con ello se podrá lograr la codiciada diferenciación de la propia oferta en el mercado hipercompetitivo de nuestros días, la consistencia en el logro periódico de crecientes resultados de venta, reservado únicamente para los pioneros que deseen romper estos u otros paradigmas, convirtiendo así en exitosos a sus negocios y actividades.

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jueves, 20 de enero de 2011

Tu método efectivo de gestión de ventas

El método efectivo de gestión de ventas es la llave que abre las puertas de una gestiión exitosa de ventas.
 
Sin embargo, y a pesar de resultar un aspecto fundamental en la dirección de todo esfuerzo de ventas, muchas organizaciones dejan librado a la interpretación personal y experiencia de los representantes esta importante responsabilidad. 

Al proceder de esta forma no se advierte que con ello se está diluyendo una productividad en ventas que se necesita obtener y que obviamente luego se exige pero que sólo se alcanza en pocos casos individuales de todo equipo de ventas.
 

Para avanzar con claridad entendamos que el "Método Efectivo de Gestión en Ventas" representa la manera en que la dirección comercial establece que se deben producir las acciones como para que se produzca la más alta eficiencia y productividad en el accionar de todos y de cada uno de los vendedores.

 
En dicho método se define y se describe detalladamente, con una orientación clara del tiempo en que insume realizar, cada una de las actividades asignadas a cargo de los vendedores y de su gerente.  


A modo de referencia, entre dichas acciones podemos señalar las siguientes:
  • Búsqueda permanente y consistente de oportundiades calificadas para vender;
  • Acciones de desarrollo y concresión de operaciones;
  • Respuesta a llamadas de clientes y prospectos;
  • Tareas administrativas varias;
  • Atención de reclamos y solución de problemas;
  • Tiempos de viaje y de espera;
  • Reporte, administración y planeamiento de gestión;
  • Tareas formativas y de fortalecimiento;
  • etc.

Lo más importante del método que se desarrolle, incluyendo todos estos aspectos inherentes a la gestión de ventas, deberá priorizar y maximizar el tiempo diario cara-a-cara  del vendedor con sus oportunidades de venta.

Esto es debido a que allí es donde se producen los resultados de venta.



Experiencias observadas en consultoría de gestión

 
Resulta muy significativo la disparidad de estilos de gestión en cada organización. 

Esto está significando que, si bien existe una determinada generación de resultados de venta, su logro y el tiempo en que se materializa nos puede estar reflejando un aspecto importante a analizar.  

Precísamente, del método de gestión aplicado surgen las siguientes reflexioenes que no siempre encuentran una respuesta clara y objetiva: ¿podríamos haber vendido más? o bien ¿de qué manera se potencia en forma homogénea a todos los integrantes del equipo para lograr la máxima productivdad en ventas? 

Si bien es sabido que cada representante tiene su propia personalidad, cuando ésta y su sóla experiencia es lo que determina cómo alcanzar sus resultados de venta, estamos ante la consecuencia más notoria de ausencia de "un método efectivo de gestión".

¿Cuáles son los síntomas que permiten detectarlo?


Existen dos aspectos fácilmente apreciables y que por sí mismos favorecen su inmediata detección. Esto ocurre cuando:
  • El 80% de las ventas las generan sólo el 20% de los integrantes del equipo; y cuando
  • El 80% de dichos resultados se producen en los últimos días de cada mes.
Cada organización posee características propias que las convierter en únicas, lo que incrementa la importancia del propio método efectivo de gestión que implica diseñarlo "a su medida". 

Lo ideal, aunque no siempre posible, es desarrollarlos luego de establecer el Plan de Negocios y antes de incorporar los representantes y gerentes de la estructura. 


De esta forma, quienes ingresan tendrán claramente lo que se espera de la gestión a realizar y, lo que es más importante aún, se define la manera en que deberán proceder para lograr y superar sus metas con consistentemente en todos los meses del año.

No importa la dimensión de la empresa ni si se trata de  negocios ya en marcha,  porque los resultados de ventas que obtengan determinarán el éxito en el mercado en que actúan.

El método efectivo de gestión en ventas requiere realizarse a partir de un objetivo diagnóstico de la estrategia de venta en aplicación y, acorde a los aspectos relevados, proceder a rediseñar e implementar el método más efectivo que cubra todos las acciones y responsabilidades de sus integrantes.

Cuando los conocimientos o experiencias en ventas no permiten desarrollar el "propio método efectivo de gestión en ventas", es conveniente recurrir a los servicios de reconocidos y experimentados especialistas quienes en pocas sesiones de consultoría de gestión contribuirán a una acertada definición incial.

Luego, y en base a la experiencia de su aplicación, podrá perfeccionarse cuantas veces se requiera mejorando e incrementado los resultados de venta que provee a la organización.

Si en toda fábrica o taller existe un método de producción que debe seguirse para la elaboración de productos, ¿por qué no aplicar un método efectivo en la  generación productiva y consistente de los vitales resultados de venta?  
 
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¿Qué imagen deseas transmitir con tus vendedores?

Este aspecto no es tenido en cuenta por muchas empresas y negocios:.

Me refiero al hecho de que, además de vender, tus vendedores transmiten la imagen de tu empresa, tus productos y tus marcas (nada más y nada menos...).

Aquí se aplica sin excepción el conocido refrán "dime con quién andas y te diré quién eres"  pero con una repercusión muy superior a lo que comunmente se tiene en cuenta.
 
En efecto, todo vendedor no sólo realiza una acción productiva vital para todo negocio.  En cada acto y contacto que realice con sus clientes actuales y potenciales está representando a la empresa, sus marcas y productos o servicios.

Cada día, todos y cada uno de sus representantes son los embajadores de su empresa. Y al respecto, ¿qué tipo de embajadores cree que necesita para ejercer una eficiente representación?

Según su respuesta y acciones consecuentes a ella, será lo que realmente logren representar, independientemente de los resultados que obtengan.
 
Cuando este aspecto no es tomado en cuenta con la importancia que verdaderamente merece, surgen una serie de complicaciones organizativas y de logros en resultados, difíciles de detectar y también de poder revertirlo.

La única verdad es lo que efectivamente perciben sus entrevistados, prospectos y clientes. Acorde al rol o papel que cada uno de ellos o ellas desempeñe, y a la satisfacción que provea cotidianamente, contribuirá sensiblemente a resaltar su imagen o a desprestigiarla.

Esto último no resulta sencillo de detectar, a menos que se realicen investigaciones específicas de mercado respecto a los niveles de satisfaccción proveídas. Caso contrario, su detección ocurre cuando ya es demasiado tarde para provocar una reacción de cambio favorable.

El primer paso que evita esta situación no deseada se relaciona con el perfil de representantes que la empresa posee.Ocurre que existen muchos potenciales candidatos para incorporarse a una empresa, pero sólo unos pocos pueden reunir las cualidades de perfil que cada empresa requiere realmente.

La clave pasa especialmente por tomarse el tiempo de reflexión y análisis necesario hasta definir cuál sería el perfil ideal para cada caso particular.

Esta acción no siempre se realiza por diferentes motivos que no vienen al caso. Pero ello no responde al hecho de que contar con buenos representantes resulta clave para el éxito de todo negocio.

Según su desempeño se traducirá en la aceptación inicial que proveerá los cimientos necesarios para generar un ámbito cordial, de confianza en sus argumentaciones y sugerencias para brindarles una satisfacción diferenciada respecto a su competencia en el mercado.

Cuando esto no ocurre se ocasiona un inapropiado desempeño en ventas que no es responsabilidad del vendedor.
 
Por el contrario, la responsabilidad es exclusivamente de quienes lo incorporaron y los dirigen.

Lo que el cliente espera de sus representantes

Describir clara y objetivamente este importante aspecto, contribuye enormememente a iniciar el camino hacia un cambio realmente positivo y caracterizado por una apreciable diferenciación.

Cada empresa tiene un target de clientes a obtener, a desarrollar y preservar satisfecho en su mercado de acción. En el análisis descriptivo de sus necesidades o de problemas a resolver o satisfacer con la oferta de productos o servicios de la organización, existe un claro y específico nivel de exigencia que es necesario satisfacer más allá de sus expectativas (diferenciación estratégica)...

Al satisfacerla por la calidad del representante, se logra realizar un primer contacto exitoso y luego, generar el ámbito propicio para el desarrollo de todo análisis que los lleve a tomar su mejor decisión de compra inicial y futuras.

En aquellos casos en que el perfil de un determinado representante no coincide con dicha expectativa, nos encontramos frente a una carencia que dificultará toda acción inicial o posterior. Para materializar el anhelo, la acción de ventas efectiva con ellos será aquella que responda más allá de sus expectativas, para lo cual cada empresario deberá establecer cuál es el perfil con el que aspira a incorporar y desarrollar a sus representantes.

El perfil ideal no es una utopía.

El perfil ideal representa un elemento indispensable para cada organización y constituye la descripción detallada de las cualidades que se requieren para que se pueda ejercer el desempeño que cada empresa espera como para que la represente exitosamente.

Contando con ello se logrará una mayor precisión y economía de tiempo en el proceso de reclutamiento y selección, a la vez que evitará errores recurrentes que provocan una costosa rotación en el sector, no sólo en términos de dinero sino también en el daño de imagen que además involucra.

En su desarrollo detallado se deberán especificar diferentes aspectos para reclutar del mercado laboral a los mejores candidatos potenciales, actuando como eficaz filtro que permita descartar a quienes no cubren con dichos requerimientos en las siguientes etapas del proceso selectivo. Y esto es válido tanto para objetivizar la gestión a cargo de un gerente de la empresa como también en el caso de solicitar el proceso de reclutamiento y selecciónde una consultora en Recursos Humanos.

En su contenido, deberá especificarse cuál o cuáles son los aspectos que podrán ser excluyentes o no excluyentes. Por ejemplo: "poseer una facilidad de expresión oral fluida", puede ser un aspecto "no negociable", mientras que "superar la edad máxima requerida" podría ser un tema "negociable", según cada circunstancia.Entre otros aspectos importantes a considerar debemos señalar "su potencial de crecimiento personal y profesional".

Con ello deberá establecerse si posee inquietudes y predisposición para evolucionar, capitalizando todo lo que la empresa pueda proveerle en capacitación inicial y continua, así como en la permeabilidad respecto a las sugerencias o señalamientos correctivos a su desempeño por parte de su supervisor o gerente.

Lo conclusión a la que podemos arribar sobre este tema desarrollado se refiere a que "lo esencial es invisible a los ojos". La imposibilidad del supervisor o gerente a estar con cada uno de sus representantes para moldear su calidad de gestión según el criterio deseado por la dirección obliga a tomar determinadas decisiones y acciones que permiten minimizar sensiblemente el riesgo que representa una inapropiada representación.

En cada mercado existen muchos ejemplos de maravillosos productos y servicios con un una perspectiva de éxito sumamente auspiciosa que quedaron en el camino, muchos de ellos por no contar con este tema resuelto.

Una vez completada esta etapa de definiciones del perfil y antes de incorporar a los candidatos "a medida" del ideal buscado, existen otros aspectos previos al inicio de su puesta en actividad que son necesarios tener resueltos para que podamos aspirar al mayor nivel de eficacia inicial posible en su desempeño.

Por todo ello, cuando decidas redactar "el perfil ideal de tus vendedores", ten muy presente qué vendedor y embajador deseas tener en tu equipo para que además de alcanzar las metas requeridas en cada mes del año sea un digno transmisor de la mejor imagen de tu empresa, tus valores, tus marcas y productos.


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Las 5 etapas que conducen a ventas de calidad

La venta de presión, de empuje y hasta de agresión para obtener resultados de venta a costa de la satisfacción de cientes, constituyen modalidades de "mala praxis" en la profesión.

Esa nefasta modalidad, producto del deconocimiento y de la acumulación de vicios por improvisados profesionales, ha sido la causa principal que generó el desprestigio de la venta durante décadas de improvisación y poca y cuestionada ética en el ejercicio de una actividad vital para todo tipo de negocio y magnitud.

Los directivos que delegaron en tales responsables la tarea de obtener sus metas no sólo dejaron de cosechar sus resultados periódicos sino que no tuvieron una clara idea de la magnitud del daño que dicho ejercicio produjo en la imagen de sus empresas, marcas, productos y servicios en el mercado.

Aunque cueste aceptarse, esta falta de cultura orientada hacia la venta con satisfacción a clientes aún persiste en nuestros días en todo país latino del mundo.

En caso de dudas, simplemente recuerde la última vez en que percibió un deleite como consecuencia de un contacto con un representante de ventas en los últimos años.

Por su parte, La Venta Profesional genera sus resultados mediante una acción basada exclusivamente en la eficiencia y en la eficacia de la gestión de sus representantes para alcanzar en forma sistemática y constante las metas periódicas establecidas.

Todo ello regido por el primero de sus 10 Fundamentos: "Obtener siempre prospectos y clientes satisfechos", asegurando deleite a cada contacto que se realiza en el mercado.
Para lograrlo, existen 5 etapas que surgen de la misma definición de  la venta proffesional, tal como figura en mi libro La Venta Profesional:

"Es un proceso por el cual una persona (vendedor/a) induce a otra (prospecto o cliente potencial) a pasar por todas y cada una de las siguientes etapas:
  • Despertar su interés en el tema
  • Reconocer la existencia de necesidades o problemas que se satisfacen o solucionan con nuestros productos o servicios
  • Aceptar que los beneficios que surgen de las argumentaciones y recomendaciones, satisfacen las necesidades o resuelven los problemas manifestados previamente
  • Despertar e incrementar su deseo de compar
  • Tomar y ejecutar la decisión de compra, asegurando la cobranza"
Con el fin de visualizar el efecto de estas 5 etapas, obsérvese que cuando nos disponemos a solucionar un problema o a buscar la satisfacción de una necesidad, todos realizamos dicha secuencia lógica de razonamiento para resolverlo.

Lo más interesante de esta definición es que es totalmente aplicable para todo producto o servicio que se desee vender mediante todas las formas y estrategias de venta que existen y hasta surjan en el futuro. La única salvedad está en cómo avanzamos a través de cada una de dichas etapas. 

En el caso de los productos de consumo masivo que se adquieren a través de la modalidad de autoservicio o bien a solicitud en los locales habilitados para su distribución, los transitamos sin asistencia de representantes de venta. A lo sumo, a través de proveedores que actúan en calidad de despacho para su entrega.

Cuando se trata de productos o servicios que no permiten adquirirse bajo esta modalidad, se hace necesario la intervención de un representante que debe adoptar un rol inductivo para transitarlas.

Al proceder analíticamente a través de una efectiva Técnica Profesional de Ventas por cada una de esas etapas sin presión alguna, induciendo al interlocutor a pasar por cada una de dichas etapas, se obtiene un verdadero análisis con un alto grado de participación del entrevistado.

Esto le permite analizar sus requerimientos y si, y sólo si, le resulta conveniente tomará su mejor decisión en cada caso. Dichas Técnicas Profesionales de Venta permiten conocer y aprender a inducir con eficacia a toda persona contactada con destino a cierres de calidad total, o en caso de que no posea necesidades relacionadas con la propia oferta a un final de entrevista que abre las puertas para futuros negocios u oportunidades de venta.

El conocimiento y dominio de dichas técnicas proveen otra fortaleza clave para quienes aprenden a aplicarlas y que se refiere a la eficacia para lograr más cierres de calidad en menor número de entrevistas realizadas.

En cuanto a la consistencia en el logro de resultados de venta, capitalizando dicha eficacia, se logra mediante un "método de gestión" desarrollado a la medida de cada estrategia de ventas que se decida aplicar y con una eficiente dirección del equipo o fuerza de ventas.

Luego del desarrollo del presente tema, puede llegarse a establecer lo que realmente se desea obtener como resultado de la propia gestión cotidiana en el mercado por parte de los propios representantes. Cuanto mayor consistencia posea la calidad  en la gestión que siembren, consistentemente mayor serán los frutos que se cosechen del mercado en cada período del año y más alto será el posicionamiento de la marca en la mente de los actuales y futuros clientes.
 
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¿Qué nos impide vender más y mejor?

"La venta es como la savia que alimenta las hojas y frutos de los árboles. Cuando abunda, la especie crece, se desarrolla y se multiplica. Al escasear, las organizaciones al igual que los árboles, se contraen a la espera de tiempos mejores. Pero cuando es insuficiente, se caerán sus frutos inmaduros y sus hojas, luego se secarán sus ramas, tronco y raíces hasta que finalmente muere"

A pesar de la validez de la metáfora que me pertenece, como consumidores padecemos cotidianamente la falta de profesionalismo de los representantes en muchas empresas cada vez en que nos disponemos a analizar una posible compra para satisfacer una necesidad, resolver un problema o simplemente al desear informarnos por nuestra sana curiosidad consumidora.

Los orígenes

Al refrescar nuestra memoria, comprendemos mejor de qué se trata. 

Nuestra falta de cultura hacia la venta proviene de prolongadas décadas de un entorno tergiversado y cuyas características de mercado nos han dejado una huella que aún perdura en nuestro días.

Ese nefasto y prolongado período económico de nuestra historia (Argentina) se vio caracterizado por ciclos inflacionarios, cortas recesiones, nuevos ciclos inflacionarios e hiperinflacionarios.

A ello, debería agregarse el condimento aislante del resto de países más evolucionados debido a un acérrimo proteccionismo de la industria nacional. La consecuencia de esto es que los consumidores, con el fin de preservar el valor adquisitivo de sus ingresos y al sólo efecto de satisfacer sus necesidades, contaban con sólo dos opciones: bien anticipaban sus compras futuras adquiriendo más de lo requerido en lo inmediato o convertían sus ingresos en dólares.

Del otro lado del mostrador, los proveedores disfrutaron largamente de este período maravilloso. Contando con mercaderías suficientes, no siempre en óptimo estado y sin garantía de devolución, recibían a los ávidos consumidores haciéndoles el favor de proveerlos.

La descortesía, el desinterés, los horarios de atención, la exhibición en parvas, etc., eran algunos de los rasgos más característicos.

En tales condiciones maravillosas, ¿quién podía pensar en capacitarse y hacer lo propio con sus representantes?

En estas condiciones y reglas de juego del mercado, la venta no era un problema; en realidad, el problema radicaba en la reposición: asegurando el precio y contando con las unidades necesarias.

El otro aspecto que caracterizó a ese período fue el tema financiero. El destino de las utilidades empresarias se multiplicaban en plazos fijos a tasas que cubrían la inflación y brindaban suculentos beneficios a los inversionistas.

Durante este período que concluyó en los '90s, muchos de resistieron a modificar su comportamiento hacia el cliente a pesar del período caracterizado por el Marketing que pregonizó el postergado hecho de ubicar al cliente en su sitio de privilegio.

Otros en cambio se formaron a través de maestros de esa vieja escuela que he denominado como "venta tradicional", en donde el afán de vender y obtener los resultados requeridos se obtienen a costa del cliente y no a su entera satisfacción.

A ello puede agregarse otro condimento autóctono: nuestra autosuficiencia "light" que nos conduce a hacer de todo, pero sin la profundidad en los conocimientos básicos ni destreza y eficiencia en su aplicación.

Encandilados con la perspectiva de mayores y fáciles ingresos, muchos se orientaron y se siguen postulando para ejercerla, improvisando sobre la marcha dado que no reciben capacitación alguna o aprendiendo de maestros con vicios de la escuela tradicional ya descripta.

Dado que la falta de cultura hacia la venta abarca a todos los niveles de la empresa, los errores de incorporar "vendedores fusible" (venden o se van) por los jefes, gerentes y empresarios PyME, agrava aún más la situación por el alto costo producido por la rotación constante y el desprestigio que tales vendedores diseminan en sus contactos cotidianos en el nicho.

Según lo expuesto y al ejercicio tan generalizado de "mala praxis" para vender, es comprensible el desprestigio de tan importante actividad empresaria. Como rasgo de ello, simplemente obsérvese que al presentarse se utilizan otras connotaciones tales como: representante de cuentas, departamento comercial, ejecutivo de cuentas, etc.

En períodos económicos recesivos prolongados como el presente, salvo para las empresas que lo ejercen profesionalmente, el tema se agrava al no producir la savia necesaria y suficiente como para su subsistencia y aun contando con los mejores productos o servicios en su nicho.

Las cifras que lo reflejan

Tener una idea de porqué no vendemos mejor se refleja a través de los resultados de una encuesta realizada en nuestro sitio La Venta Profesional© (www.HellerConsulting.com).

Conocer lo que ocurre en un determinado país es importante, pero mucho más lo es saber en qué estado se encuentra el caso propio.

Por lo que cada quien podrá extraer las conclusiones que se detallan a continuación de cada una de las preguntas y sus respuestas. He aquí donde comienzan a jugar las oportunidades a favor para quienes emprenden las acciones acertadas que corresponden.

De 460 vendedores de Argentina, compuestos emprendedores que venden, vendedores independientes y en relación de dependencia, surgen de los porcentajes de respuesta a nuestras siguientes preguntas:

1. Si estás vendiendo, ¿lo has elegido para hacerlo porque te agrada realmente? SI: 93% - NO: 7% Tengamos presente que nadie podrá ser exitoso si no ama lo que hace, pero si le desagrada ejercer la profesión de vender, magros serán los resultados que obtenga y grande será el desprestigio para sus productos o servicios y la propia empresa, por la negativa imagen que se transmita.

2. ¿Participaste alguna vez en un Curso de Ventas? SI: 76% - NO: 24% Así como nadie se subiría a un avión tripulado por un comandante sin formación, o tampoco se dejaría operar de apendicitis por un médico no recibido, contar con representantes no capacitados para el ejercicio perjudicará a cada consumidor que contacte puesto que no recibirá lo que requiere de él que es precisamente el asesoramiento que garantice su mejor decisión de compra. Asimismo, los resultados que produzca serán siempre fortuitos e inciertos.

3. ¿Recibiste capacitación formal en ventas en los últimos 12 meses? SI: 79% - NO: 21% El avance tecnológico obliga a toda profesión a una formación incial, a una actualización y perfeccionamiento permanentes. Estos son fundamentos básicos que tienen mayor vigencia en mercados de hipercompetitividad puesto que su carencia sólo consigue ser desplazados del nicho de mercado por las empresas que lo hacen en forma apropiada y de manera sistemática.

4. ¿Aprendiste a aplicar una técnica de ventas? SI: 82% - NO: 18% Las técnicas de venta son las que permiten a todo vendedor "inducir" a cada contacto a transitar por las cinco etapas del proceso de la venta (despertar su interés, reconocer sus necesidades, aceptar los beneficios que las satisfacen, despertar y acrecentar el deseo de propiedad para luego tomar y ejecutar la decisión de compra). La reflexión que surge para casi 1/5 de los representantes argentinos es: ¿cómo pueden vender entonces? O también: Si lo logran, ¿con qué nivel de satisfacción del cliente lo pueden realizar?

5. El 80% de tus resultados, ¿los obtienes en la última semana del mes? SI:44% - NO:56% La carencia de "un método de trabajo efectivo" que permita generar constantemente los resultados durante cada día del mes, hace que se traduzca en presiones de último momento hacia los vendedores para lograr el objetivo o renunciar al empleo. Los resultados así obtenidos por más del 50% de los vendedores argentinos, son siempre a "costa de clientes", puesto que ellos reciben la presión que la empresa ejerció sobre los vendedores. De aplicarse una detección sistemática de oportunidades frescas en cada nicho (Prospecting), se evita este fenómeno rechazado por todo cliente, generándose un constante crecimiento de la cartera con nuevos clientes satisfechos y produciendo un logro continuo de resultados periódicos sin que ello ocurra en los últimos días de cada mes.

6. ¿Te preocupa desconocer a quién venderle al comienzo de cada mes? SI:81% - NO:19% Agotada una instancia recurrente que consiste en venderle siempre a los mismos clientes, es lógico la alta preocupación manifestada en las respuestas. A raíz de la carencia descripta anteriormente, al no desarrollar tareas que generen la cantidad de oportunidades frescas y necesarias para concretar sus ventas (Prospecting) y ante la única posibilidad de venderle a sus actuales clientes y sus pocos referidos que no alcanzan a ser lo suficiente y necesario para generar sus resultados mensuales previstos en sus objetivos.

7. ¿Tienes objetivos mensuales asignados a alcanzar? SI: 63% - NO:38% Toda gestión empresaria debe tener sus metas, especialmente la venta. La no aplicación de metas de venta denota una falencia gerencial seria en la conducción de tales empresas, puesto que representa no contar con un Plan de Negocios que canalice las acciones de todos sus integrantes hacia sus metas. Para formarse una idea de la gravedad que esto significa, imagínese un comandante de Jumbo completo de pasajeros que despega sin tener un destino cierto hacia donde arribar.

8. ¿Conoces todos tus productos y servicios en términos de "beneficios" para tus clientes? SI:88% - NO:13% Debido al hecho de que la gente no compra productos o servicios sino sólo los beneficios que le proveerán cuando sean propietarios o usuarios de los mismos, el vendedor que no los conoce en dichos términos, sencillamente no vende. Esto se debe a que el desconocimiento le impide inducir a sus potenciales compradores a que visualicen una promesa cierta de disfrutarlos como para que surja el deseo de adquirirlos y se decidan por comprarlos.

9. ¿Conoces todos los productos o servicios de tu competencia de igual forma que los tuyos? SI:49% - NO:51% Este desconocimiento limita a los representantes en generar ventas con sus cotidianas oportunidades. Las objeciones deben responderse con conocimientos sobre lo que todo consumidor informado le planteará al vendedor. Al desconocer de lo que le hablan sólo cuenta con dos opciones: reconocer su ignorancia o desviar su atención ignorándola. Tanto la primera como la segunda opción no sólo le harán perder muchas ventas, también obtiene un desprestigio personal y el de la empresa a la que representa por falta de idoneidad y profesionalismo.

10. ¿Has leído alguna vez un libro de ventas? SI:63% - NO:25% No he conocido médico, ingeniero, abogado, arquitecto que no hayan leído alguna vez un libro referente a su profesión. De igual forma, el vendedor que ama lo que hace debería incrementar su curiosidad por lo que otros vendedores exitosos hacen y enriquecer sus conocimientos y aprender de sus experiencias desarrolladas en libros.

11. ¿Crees que dominando sólo técnicas de cierre lograrás mayores y mejores resultados de venta? SI: 19% - NO:81% Esta respuesta queda reflejado que casi la quinta parte considera que a través del conocimiento de técnicas de cierre únicamente producirá más y mejores ventas. Es precisamente lo que se percibe cuando un vendedor basa en argumentaciones no apropiadas y en triquiñuelas para obtener su fin a costa de los ocasionales compradores. Cuando ello ocurre y acorde a su gravedad, la insatisfacción producirá un reclamo inmediato por la devolución, siempre acompañado del sabor amargo de haber sido utilizados para un fin exclusivo del vendedor y su empresa, cuando no estaba listos para tomar la mejor decisión de compra.

Conclusiones

La venta es una profesión necesaria en toda empresa, cuyo ejercicio requiere de una sincera predisposición, de conocimientos técnicos actualizados, de habilidades y destrezas de comprobada eficacia. 

Ejercerla con eficiencia exige de una inteligencia aplicada según el producto o servicio, de una actualización constante, de la planificación de sus actos y esfuerzo permanentes. 

Si bien no requiere título universitario para ejercerla, en su lugar exige amarla, tener el perfil acorde a la empresa y productos o servicios, aprender a ejercerla profesionalmente y desear constantemente la satisfacción del consumidor, aún en los casos en que no compre en la primera entrevista.

También exige que el vendedor que concretó la operación se asegure de su satisfacción post venta para mantener abierta la puerta para futuras ventas y capitalizar las referencias que socialmente obtenga de sus clientes satisfechos. 

Sólo de esta forma podrá modificarse la desenfocada cultura hacia la venta existente y pasar a competir en igualdad hasta con los más evolucionados mercados de nuestro Mundo globalizado e hipercompetitivo. Esto es: vendiendo profesionalmente.
 
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